Desierto del cielo azul
en el concurso ILUMINARTE 2016
El éxito del primer vuelo cósmico despierta en toda la nueva generación de nuestra humanidad. Este mundo es evolutivo. Su tejido material, su constitución molecular, va transformándose de un estado caótico y sin forma a uno de orden perfeccionado y todas sus formas de vida, el género humanoide cósmico incluido, van creciendo desde lo primitivo a lo avanzado, desde lo sencillo a lo complejo, desde lo bruto a lo consciente y desde lo bestial a lo refinado. Toda la creación va elaborándose y acercándose a la perfección.